Cabezo de la Sal. GE
Tras
caída bajando el Santuario de la Virgen del Oro y cuando parecía que
todo pasaría relativamente fácil y pronto se han ido complicando las
cosas y no consigo
salir del ovillo en el que me encuentro metido, entre que curan las
heridas, entre que no descanso bien por la noche, entre que estoy como
con gripe, el caso es que parece que me han metido una paliza una banda
de gamberros en un callejón y me han reventado el cuerpo. Estoy agusanao perdío
Ya
parto con cansera de salida, pereza y falta de ganas pero he puesto la
ruta de Pinoso que es inédita para la inmensa mayoría de nosotros y por
esa parte, la de explorador, me apetece hacerla, así que ahí estamos, en
línea de salida. Como suele pasar últimamente, y sobre todo en el
Carrefour, no hay mucha presencia aunque luego aumenta por el camino. De
todas maneras, hoy, hay faltas, el puente no ayuda posiblemente y la
ruta tampoco ha debido convencer a algunos compañeros. Cada día que pasa
mengua nuestro grupo cuando el de los vecinos, los Fonsoto van a más,
los tiempos en los que huíamos de los arrimaos han pasado y ahora casi
que agradecemos a foráneos cuando nos acompañan.
Llevamos
buen ritmo de marcha comandados por José 'el Cámara' y también los
primeros kms Marifé, hasta que llegando a Santomera ya nuestra bella
compañera se ha moldeado convenientemente el pelo y pasa a vagones.
Cuando poco más tarde Rafa Aragón coge la máquina echa más carbón e
incrementa la velocidad hasta llegar a Abanilla. Mucho ritmo me parece
aunque vaya guardadico entre los vagones.
En llegando
a Cuesta Colorá alguna foto y enseguida empiezan las miserias, las
piernas no van y la cabeza tampoco lucha, es una falla general como
dicen los sudamericanos, roto para que se me entienda. No voy. Así que
en El Algarrobo segundas y definitivas miserias y veo como el tren se va
sin posibilidad de agarrarme de ninguna manera, adiooooooosss! Y poco a
poco se va alejando el grupo, menos mal que siempre hay algún muerto
del día y hoy no hay uno sino dos, hago sociedad con Alfonso Guillen, el
primo, a ver quién es capaz de dar más chepazos por minuto, mae mia,
cómo vamos!
Unos
kms más adelante se para el grupo y se procede al reagrupamiento, hoy
me toca a mí ser el 'esperado', qué le vamos a hacer. Después de
reagrupar continuamos pero en un repechico de nada antes de avistar
Pinoso ooootra vez me quedo, no puedo ni con las botas. Y me quedo solo
de nuevo, ahora ya ni el Primo, éste ha resucitado. Aunque un poco más
tarde me encuentro a Patricio que está como un zombi pero luego resulta
que dice que se vuelve y que no sube. En Pinoso nos perdemos un poco y
tras preguntar un paisano me dice por dos veces el camino y por dos
veces que no se puede subir con la bici de carretera. Bueno, bueno, tú
déjame que ya veremos si se puede o no.
Las patas las llevo cuadradas, como dicen los italianos, gamba di legno, pero empiezo a buscar el repetidor que hay en el mojón de sal ese de Pinoso. Las pendientes son suaves pero poco a poco van in crescendo,
hay un cruce problemático pero acierto con él, y aquí las pendientes
empiezan a crecer y a subir ya por encima de la decena su porcentaje. De
pronto llego a una curva cerrada a izquierdas y allí está una gran
colonia de compañeros apostados avisando y animando de la monstruosidad
que venía a continuación. -¿Qué hacemos? -¿Somos leones o güevones?
Nunca me bajé de mi bici de carretera por muy fuerte que fuera la
pendiente, nunca, y ahora tampoco me apetecía que fuera, así que acepto
el envido y empiezo a aplicar esa gran técnica deportiva y filosófica
que dice, una pedalada y luego otra y así hasta el final. Y la pendiente
subió del 12, del 15, del 18, del 20 y según dicen compañeros llegó a
puntos de picar 27% de desnivel por lo que tenía su fundamento el
zamarro de Pinoso cuando decía que no se podía. Se puede, aunque cuesta
la misma vida.
Es
duro, durísimo, una rampa que te llega por lo civil y por lo penal.
Bru-tal. No se puede tampoco dar muchas eses porque es estrecha la
carretera. Subo más lento que los caracoles viejos... pero consigo subir
y me encaramo a lo más alto, con un par.
Ya
retornando ellos me cruzo con varios compañeros que también han
aceptado el reto, Belmonte, Muñoz, José Lilo, MariCruz, Zape, Paco y
Jorge Manzanera y José 'Cámara' más algunos acompañantee: Guillermo
Ponte Otra, Guillermo el forestal, Xose,...
Guille
y José se vuelven para acompañarme en la llegada al repetidor y nos
hacemos unas buenas fotos cuando de pronto aparece el último valiente,
el Primo. Qué bárbaro, qué pundonor, dice que me vio pasar y no quiso
ser menos, al fin y al cabo hemos sido pareja del día.
En
la vuelta por La Algueña no tengo fuerzas apenas para mantenerme en los
grupos y además hay una pareja, que parecen Tip y Coll que están dando
guerra, mucha guerra, Rafa Aragón (Tip) y Jorge Manzanera (Coll) que
están sacudiéndose entre ellos y azuzando al grupo por lo que yo cada
vez voy más-mal.
En
la subida al Albaterolo Norte me quedo aislado con Felipe que me hace
una labor de remolcador increíble y que nunca podré agradecerle lo
suficiente. Bajando ya el Albaterolo voy zombi, deshidratado, con
hambre,... ahora me acuerdo de las pájaras de Perico Delgado, estoy
fatal, en algún momento casi me salgo por cansancio y falta de atención,
peligro peligro. Siempre con Felipe por delante echándome un capote
detrás de otro consigo integrarme de nuevo en el grupo. (Gracias Felipe
por lo buen amigo que eres).
Me
engancho al pelotón y voy integrado en él hasta Orihuela pero allí en
el ascenso al túnel me vuelvo a quedar, tengo escalofríos, hace mucho
calor, me marca 36º el termómetro buff Bajando me cojo otra vez al grupo
pero se me acaba el agua por completo y estoy penando mucho, así que
antes de llegar a Santomera le digo a Buytrago que necesito agua con
urgencia y me paro. Él ha sido testigo de mi sufrimiento durante todo el
día.
Y
ya me voy solo hasta Murcia, bueno, solo no porque me acompaña mi buen
amigo José Martínez Sánchez, 'Buytrago' con el coche de apoyo.
-Gracias-
Llego a casa roto completamente, acartonado, deshidratado, como un pajarraco de los gordos y desplumaos, una piltrafa de tío.
A ver si se me pasa la plaga ésta ya de una vez.
Comentarios
Publicar un comentario