Tour del Juguete

 

(Tengo Via libre para publicar esta parte de la crónica del Tour del juguete. Por la dureza de su contenido restringimos su lectura exclusiva a los socios del club)

La verdadera historia del Tour del Juguete.

Resulta que salimos muy retrasados. Iniciamos el primer puerto y enseguida Oscar toma el mando. Se pone como un poseso a tirar para arriba. Nos pone contra las cuerdas a los otros 3 (gines, Rafa y yo). Llegamos al segundo puerto y sigue igual. Ginés va controlando a Rafa, que se va quedando (no pita hoy), y tiene que ir frenando al desatado. Que sigue ere que erre por el tramo pestoso desde Jijona a Torremanzanas. Es frenado en varias veces por Ginés. Esto no lo ví personalmente, me lo contaron. Me uno a ellos al final de este tramo.

Así las cosas, iniciamos la subida a Tudons. La consigna es hacer la marcha los 4 juntos. Vamos al ritmo que Rafa puede mantener hoy, cuando se nos quedaba el pajarito Oscar silbaba, “se nos queda el gorrioncillo” y mandaba contener los watios a Gines. A falta de 4 km para coronar, dejamos de oir silbidos. Se hizo el silencio. Oscar se estaba quedando. Se ha quedado vacío. A rastras consigue coronar el puerto. Rafa se arropa con su manta. Mal estaba la cosa, Oscar necesita de 10 minutos en sala de reanimación. 

Re- emprendemos de nuevo la marcha, pero no pita. En el primer repecho que nos encontramos, Oscar se da cuenta que no puede. Le dan calambres en las 2 piernas al mismo tiempo. Es un claro aviso. “si me queréis irse”, nos dice. Pero un globero nunca abandona al compañero. Paramos con él. No se veía con fuerzas para seguir. Al final opta por abandonar la marcha. Es lo mejor y más prudente. En el desvío para subir Benifallim opta por seguir recto en dirección a Ibi. Hoy no ha sido su día. No pasa nada, una petardada la pega cualquiera, aunque está es muy sonora, no deja de ser eso. Una semana de entrenos inadecuados, un inicio de marcha demasiado alegre con una mejorable alimentación (desayuno y en ruta) le juegan una mala pasada al muchacho. Mucho pim, pam, pum, y al final puff. Mariano, nopuesell, no aprende.

Pues aquí estamos los 3 superviviente, subiendo el penúltimo puerto del día. Gines y un servidor llevamos a Rafa en carroza. A Gines tengo que atarlo corto. Se revoluciona con mirarlo y suelta los watios a la primera insinuación. En buena armonía coronamos y hacemos el transito hasta Jijona. A Rafa lo vamos mimando, sin darle tirones, lo llevamos tapaico, sin que le de el aire no vaya a ser que se nos resfrie.

Iniciamos la subida a la Carrasqueta. Aquí está el tio del mazo atacando de nuevo, aquí es donde recojemos todos los caracoles que había, y es donde Ginés para a tomar su preceptiva cerveza. Rafa no puede, el rafa se queda. Tardamos 45 minutos en subir, una eternidad (El choco lo hizo en 32’42’’ y Diego en 36’40’’). Unos tramos a rueda y otros a 100 metros, al final coronamos los tres el puerto. Avituallamos y para meta.

Todavía le quedaría el ultimo sofocón a Rafa, que casi lo mata. Ginés abre un poco de gas para cazar un grupito que iba delante (y en el que iba el pajarito de Cuenca, amigo de Melero)y casi lo manda a urgencias. Y así las cosas llegamos, por fin, a meta. Donde Oscar nos esperaba tomando una cerveza y con una sonrisa. Por nadie pase su calvario, y lo que le espera en días próximos.

Después tuvimos un reparador baño en la piscina, ducha y la posterior comida-tertulia. Os podéis imaginar la conversación.